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Concepto
La relación entre riesgo y beneficio esperado es directa, es decir, a medida que el riesgo de una inversión es mayor, su beneficio esperado también es mayor.
En términos prácticos, el riesgo es la probabilidad de ocurrencia de un evento que puede cambiar el comportamiento cotidiano de una operación. Estos riesgos pueden ser positivos o negativos, aunque generalmente nos enfocamos en los negativos.
En el siguiente artículo, se pueden ver los riesgos más comunes para las pequeñas y medianas empresas, las cuales representan más del 80% de las empresas a nivel mundial.
Riesgos positivos (oportunidades)
Los riesgos positivos son aquellos que mejoran nuestras expectativas respecto a una situación y generalmente producen un cumplimiento por encima de los objetivos.
Por ejemplo: un aumento de la demanda de nuestro producto es un riesgo positivo, dado que impulsa las ventas. Sin embargo, también puede ser negativo, porque puede aumentar los costes y gastos por encima del crecimiento de los ingresos, lo que reduciría la rentabilidad.
Por lo anterior, la planificación estratégica de la empresa debe incluir los riesgos junto a los objetivos y metas a corto, medio y largo plazo. De esta forma se evalúan los posibles escenarios y se toman decisiones para aprovechar los cambios.
Riesgos negativos (amenazas)
Los riesgos negativos son aquellos que desmejoran nuestras estimaciones sobre un proceso o circunstancia y generan un impacto contrario a los objetivos.
Por ejemplo: un apagón es un riesgo negativo para las operaciones de las empresas, porque las paraliza. Sin embargo, si hemos elaborado un plan de contingencia y realizado las inversiones necesarias, es posible mantener las operaciones críticas y usarlas como diferenciador frente a la competidores.
En los dos ejemplos anteriores, se observa que independientemente del tipo de riesgo, estos pueden transformarse para beneficiar o perjudicar nuestros objetivos. Con esto reforzamos que para gerenciar adecuadamente una empresa, debemos identificar, evaluar, controlar y transferir los riesgos.
¿De qué depende la relación entre riesgo y beneficio?
La relación entre riesgo y beneficio depende de múltiples factores, entre los cuales están:
Tipos de riesgo
Hay diferentes tipos de riesgo, pero los más comunes son los financieros, de mercado y operacionales, aunque el análisis debe ser global. Los riesgos de la naturaleza, reputacionales o cibernéticos también son importantes y de gran impacto para las empresas. Por ejemplo, el fraude es un riesgo financiero negativo, pero si el sistema antifraude de una empresa es mejor que el de la competencia, puede ser un elemento diferenciador para mejorar las ventas.
Finanzas
Dependiendo de las finanzas de las empresas, los riesgo pueden ser mayores o menores y con ello mejorar sus perspectivas futuras.
- Tipos de activos: Si los activos corrientes son muy altos, pueden ser muy vulnerables a pérdidas de valor por inflación, aunque esto depende del tipo de empresa. Si los activos son mayoritariamente inmobiliarios, pueden generar falta de liquidez a la empresa, aunque cada caso es particular.
- Relación deuda / activos: Si la relación de deuda/ activos es baja, el riesgo de solvencia es bajo, lo que aleja el riesgo de quiebra y mejora el poder de negociación frente a acreedores
- Relación deuda corriente / activo corriente: Si la relación es baja, generalmente la empresa tiene liquidez para enfrentar sus deudas. Lo anterior, permite una mejor negociación de la tasa de interés
- Tipo de empresa: Hay empresas cuyo activo principal es líquido (bancos), otras es ilíquido (constructoras), pero la mayoría tienen una mezcla entre ambos. Esa mezcla tiene un equilibrio que depende de cada sector de la economía y del plan estratégico de la empresa, por lo que el análisis entre riesgos y beneficios se debe hacer de forma particular.
- Macroeconomía: Si la economía crece, es importante que la empresa posea la capacidad de crecer. Por el contrario, si la economía se estanca o decrece, la empresa debe ser capaz de reducir costes para mantener su beneficio, reduciendo el riesgo.
En el siguiente artículo se muestra que la inflación es un riesgo positivo (oportunidad) o negativo (amenaza) dependiendo del tipo de activos.